miércoles, 27 de enero de 2016

HOT DOGS

Tradicionalmente, los hot dogs están hechos de una mezcla de carne de cerdo, de res y pollo. Se utilizan las sobras de los cortes de la res o cortes de cerdo y subproductos 'comestible' de la matanza. Estos incluyen el tejido graso, pieles, pies y cabezas de animales.
Estos recortes son triturados y mezclados entre sí hasta formar una pasta espesa. Para hacer que las salchichas sepan bien, se añade una gran cantidad de aditivos, incluyendo cantidades excesivas de sal, jarabe de maíz, glutamato monosódico (MSG), nitratos y otros productos químicos.
Los aromas varían dependiendo del lugar donde se venden los hot dogs, ya que las personas de diferentes regiones tienen diferentes gustos. El Departamento de Agricultura de Estados Unidos (USDA) no requiere que los fabricantes listen los saborizantes en las etiquetas, por lo que casi todo vale. Los saborizantes incluyen el glutamato monosódico (MSG) y el carmín - un tinte de las conchas de los pequeños escarabajos, hervida en amoníaco o carbonato de sodio.
Los nitratos y nitritos son los siguientes en la lista de aditivos utilizados en los hot dogs. En presencia de altas temperaturas se combinan con las aminas en la carne procesada para formar nitrosaminas.
Son las nitrosaminas que se han relacionado con el cáncer - especialmente de colon, vejiga, estómago y cáncer de páncreas.
De acuerdo con el Instituto Americano para la Investigación del Cáncer, un hot dog al día aumenta el riesgo de cáncer colorrectal en un 21%. Incluso los hot dogs orgánicos contienen nitrito, a veces incluso en cantidades más altas que los hot dogs convencionales.
Si piensas que no puede vivir sin tus hot dogs, entonces cómelos de vez en cuando y ve por marcas que:
- No contengan nitratos.
- Diga 100% carne de res, o 100% de pollo, de modo sepas que no se han utilizado subproductos.
- Que no contengan MSG, jarabe de maíz, conservantes y aditivos.
- Que sean vendidos por pequeños granjeros los locales que los producen en sus fincas.
Mejor que todo, evita las carnes procesadas en su totalidad. Si comes carne, asegúrate de que provienen de animales criados orgánicamente, alimentados con pasto y criados humanamente. Y no te olvides de comer un montón de verduras frescas con él.